Por alguna razón tengo la idea de que toda madre tiene en su cocina un calendario, ahí las súper mamás anotan los recitales de piano, juntas de padres de familia, fiestas de cumpleaños, etc. Hay días buenos en los que las mamás miramos el calendario con ilusión anticipando los días de fiesta y los partidos de soccer y días no tan buenos en que una quisiera dejarlo todo e irse al Caribe o a dondequiera que sea la foto que tenga dicho calendario.

Monday 26 September 2011

No leí el libro, vi la historieta

En mis épocas de estudiante, nerd que era yo, me chocaban las compañeras que cinco minutos antes de la clase de literatura llegaran diciendo “no leí nada, cuéntame de que se trata el libro”. ¿Cómo esperaban que en cinco minutos resumiera 200 páginas? Años más tarde, cuando di clases de Análisis Literario menos podía tolerar que los alumnos me dijeran “no maestra, no leí el libro, pero vi la película”, con ganas de reprobarlos. Y sin embargo hoy qué más quisiera que tener una versión condensada o una película que resuma el altero de libros de cómo ser mejores padres que está en mi buró.

Desde niña he sido una ávida lectora y encuentro una calma especial al leer, además de que me apasiona transportarme a otro lugar y perderme entre las calles de Macondo o en Diagon Alley pero últimamente en mi buró sólo hay libros para aprender el complicado oficio de ser madre, y el último libro de Laura Restrepo – todavía envuelto en plástico –  se encuentra sepultado bajo Simplicity Parenting, El Hijo Tirano (qué título tan aterrador si me permiten decirlo), Toddler Tamming y Setting Limits for your Strong-Willed Child. Libros que he comprado recientemente o que me han regalado, y que agradezco profundamente, pero ¿qué fue de los días en que me regalaban el último libro de García Márquez?

Sin duda alguna, un libro serio sobre como ser mejor padres es muy útil (y recalco serio porque ¡hay cada cosa!) porque a veces no es hasta que lo vemos en blanco y negro que entendemos mejor a nuestros hijos y nuestra relación con ellos. Y aunque la teoría de estos libros por lo general es muy buena, a veces no es fácil ponerla en práctica, ya sea porque se necesita ser un absoluto Zen master para recordar tener paciencia e implementar todas las técnicas en los momentos de caos, o porque simplemente no nos acomoda el método prescrito. Recientemente leí un texto de una madre a quien le había funcionado apaciguar los berrinches de su hijo amamantándolo. Yo estoy en pro de la leche materna y chido por ella, pero la idea de perseguir a mi hijo de cuatro años con la bubu al aire por el parque, el supermercado y en cualquier lugar en que acostumbra hacer berrinche, realmente no es lo mío.

Después de mucho buscar finalmente encontré una versión condensada de todo lo que necesito saber para ser una mejor madre. Esta historieta de Valeria Gallo – excelente madre y una de mis ilustradoras favoritas – resume todo lo que debemos de saber sobre un niño y como tratarlo. Es algo muy simple pero muy cierto y desde ahora se encuentra pegado en la puerta de mi refrigerador.


* Gracias infinitas a Valeria por haber creado esta historieta y por habermela prestado; y a todos los que me han regalado libros - de cualquier tipo - a lo largo de mi vida.